Simbolo Adrián Cohen

adrián cohan



El reto de ser un profesional independiente en la argentina



Diseño de productos

Durante el verano de mi cuarto año de la Facultad conseguí un vuelo muy barato, en aquel entonces de la icónica aerolínea PanAm, que vendía pasajes a tres destinos específicos: Argentina, Estados Unidos y Europa. Me fui a Los Ángeles porque tenía un amigo que vivía ahí y visité la escuela Art Center College of Design, en Pasadena. Quedé absolutamente impresionado con la calidad de los trabajos y decidí aplicar. Me aceptaron, pero me solicitaban que terminara los estudios de grado para poder ingresar. Demandaba mucho tiempo y yo quería terminar la facultad y trabajar pero para eso en Estados Unidos es muy difícil conseguir visa. En las universidades que estuve me explicaron que luego de la visa de estudiante, te daban un año para hacer una práctica profesional, o sea trabajar en forma legal y rentada. Así que me propuse terminar en Argentina y posteriormente hacer un Master, para después poder trabajar. Y eso hice. Como me interesaba la investigación de nuevos materiales y tendencias, visité varias universidades y elegí Rhode Island School of Design (RISD) porque me pareció que ahí podía hacer una buena investigación.

Gracias a la práctica también aprendí a diseñar, es así como realmente se aprende un oficio...

Cuando terminé en RISD conseguí trabajo en Fitch Richardson Smith, uno de los estudios más grandes de diseño de Estados Unidos, que luego pasó a llamarse Fitch, porque fue comprado por esa empresa inglesa, y se convirtió en una consultora global. Me tocó trabajar con gente muy talentosa y de diversas disciplinas. Aprendí mucho, sobre todo cómo se hace consultoría en diseño de forma profesional, cómo se proveen servicios profesionales de diseño, cómo se presupuesta, y cómo se organiza y distribuye el trabajo. Gracias a la práctica también aprendí a diseñar, es así como realmente se aprende un oficio. Crecimos mucho, hasta nos compramos una oficina. Hacia fines de 1999 empe zaron a caerse nuestros clientes como fichas de dominó. Esto siguió así por dos años más hasta que en 2001 per - dimos el cliente más grande; Gatic nos cortó la cadena de pagos y debíamos a nuestros proveedores. Mi socio se de primió. Fue todo un desastre. Un día me dijo que emigraba a Canadá. Hasta ese momento denominamos al estudio Cohan, Tornini & Asociados. Tras los cambios pasó a llamarse Cohan Design Group, nombre que hoy conserva.

Me propuse que debía hacer una marca de diseño masiva y que tenía que entrar en los grandes canales

Volví a Argentina porque nació mi primera hija y mi mujer no quería estar sola, extrañaba la familia. Así que un día re - nuncié y sin ningún plan B, simplemente regresé después de vivir más de cinco años en Estados Unidos. En Argentina empecé de cero, fue muy duro. Al volver abrí mi propio estudio al que llamé Vía Diseño. El primer año me asocié con mi hermano quien también es diseñador industrial. Al año siguiente trabajé solo. Durante el tercer año me llamó Mario Tornini para compartir una oficina, así que me mudé con él. Creo que me llamó por error, según me cuen - ta quería comunicarse con otro diseña dor, pero yo no creo en las casualidades.

El primer año sólo compartimos oficina y lentamente nos empezamos a dar cuenta de que nos complementába. En realidad la chispa inicial la dio el Centro Metropolitano de Diseño. En 2001 convocó a un concurso para pre - sentar ideas para mostrar en el Salone Satellite de Milán de abril de 2002. Man - de mi portfolio y gané. Como premio me pagaban el stand. Por mi parte tenía que hacerme cargo de crear los prototipos, llevar los productos, los pasajes, la es - tadía, etc. Al final de 2001, y cuando ya había encaminado todo, me anunciaron que no contaban con el dinero para pa - gar el stand (justo pasamos del 1 a 1 al 3 a 1). Yo ya estaba embarcado, pedí prés - tamos familiares por lo que de todos modos, decidí participar.

Ya era 2002 y como nos iba tan mal con los servicios empecé a pensar en la idea de fabricar yo mismo. Así arrancó La - vacatada que hoy es la marca de pro - ductos de decoración y accesorios de mobiliario de Cohan Design Group. Con Lavacatada obtuve una indepen - dencia económica y de diseño que no me dio jamás ningún cliente ni proyecto. Empezó como un acto de subsistencia y estrategia. Si no podía vender servicios, tenía que vender productos (En la época del 1 a 1 se importaba todo, nadie fabri - caba por ende nadie necesitaba servi - cios de diseño industrial). Me propuse que nunca más un vaivén económico me podría quitar la subsistencia y por esto pensé que agregar productos a mi oferta podría balancear mi economía.
adrian

bio.


  • Diseñador Industrial
  • Docente
  • Escritor

Adrián Cohan es miembro del Comité Asesor del Centro de Investigación y Desarrollo en Diseño Industrial, INTI y miembro del jurado del “Premio Presen- tes” de Buenos Aires.

Es también Director del Cohan Design Group, Buenos Aires y tiene un Máster en Diseño Industrial de la Rhode Island School of Design. Obtuvo una licencia- tura en diseño industrial por la Universi- dad Nacional de la Plata. Además, ha sido profesor del Instituto de Tecnolo- gía ORT y Jefe de trabajos prácticos de FADU.

Es autor de varias publicaciones, como G7 Design Magazine, Clarín Suplemen- to Arquitectura y DeDiseño Nº 27.

También ha recibido varios premios en Japón, Argentina, EEUUa e Italia.

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